sanitizamos todos nuestros productos y envíos
El proceso
Utilizamos para este proceso el Reglamento Sanitario de los Alimentos (RSA) en su versión vigente. Aseo y sanitización de equipos, utensilios y estructura:
Este procedimiento es otro de los pilares fundamentales para asegurar la inocuidad de los alimentos. El programa de limpieza y sanitización es un conjunto de operaciones que tienen como fin eliminar la suciedad y mantener controlada, dentro de los límites permitidos, la carga microbiana u otros contaminantes, preparando las instalaciones para el siguiente ciclo productivo.
La limpieza se realiza sobre las distintas superficies, clasificándose éstas como las que se encuentran en contacto directo con el alimento (superficies de trabajo, utensilios, equipos, entre otros), y las que no están en contacto directo con los alimentos (paredes, techos, suelos, entre otros).
Aunque la limpieza y sanitización se traten de forma conjunta, son intervenciones distintas, independientes, complementarias e imprescindibles, dentro de los procesos de higiene de los alimentos.
La limpieza tiene como objetivo la eliminación de la suciedad orgánica y/o inorgánica adherida.
Es importante incluir los medios de transporte ya que la empresa es responsable del despacho de sus productos.
Productos a utilizar
Para la limpieza se emplearán productos detergentes, en combinación con métodos físicos como la aplicación de agua o vapor a determinada presión y temperatura.
La elección del detergente dependerá de factores como el tipo de suciedad, el método de aplicación, el material a limpiar, la dureza del agua, etc.
Para la sanitización se emplearán sanitizantes.
En su elección se tendrán en cuenta distintos factores como el método de aplicación, el tipo de microorganismo a eliminar, la acción sanitizante
Tanto los detergentes como los sanitizantes son productos químicos que son aplicados estrictamente según las instrucciones de uso de los fabricantes y según las normas de los organismos competentes de salud, de igual manera todos nuestros sanitizantes están aprobados por el Reglamento Sanitario de los Alimentos (RSA).
En este sentido es también importante respetar los tiempos de aplicación establecidos por los fabricantes, puesto que estos productos, especialmente los sanitizantes, podrían no ser eficaces si se retiran demasiado rápido. Además, de acuerdo al sanitizante utilizado se debe indicar la necesidad que las superficies sean enjuagadas posterior a la aplicación del sanitizante y previo al uso de la superficie.
Algunas Fuentes de Contaminación:
- Manipuladores de alimentos.
- Materias primas crudas.
- Equipos o utensilios.
- Ambiente de la planta de procesamiento.
- Envases reutilizados.
- Material de empaque.
- Lubricantes de grado no alimenticio.
- Rodenticidas, plaguicidas.
- Gotas de condensación.
- Falta de ventilación.
- Aguas apozadas que pueden producir salpicaduras, entre otros.